miércoles, octubre 18, 2006

Marx nos mintió: Nunca seremos todos iguales



O el conflicto entre armonía y conflicto

Donde no nos mintió seguramente es sobre la lucha de clases: Sea donde sea que estés ubicado en la larga escalera socioeconómica siempre habrá alguien que tiene más y alguien que tiene menos. Las clases en todo caso se multiplican y el criterio meramente económico puede no ser suficiente para evaluar la compleja trama social del presente, en especial en los grandes centros urbanos.
Si consideramos ademas del tristemente célebre ingreso per cápita la formación escolar, académica y/o informal, el acceso a las comunicaciones, calidad de la alimentación, posibilidad de viajes y/o recreación, acceso a la cultura, tipo y lugar de vivienda, medios disponibles de transporte, posibilidad de vacaciones decentes, satisfacción de necesidades mínimas, medias y máximas... y la lista sigue según a quién se le pregunte...
La conclusión final podría ser que hay casi tantas "clases" como personas: Unas 6 mil millones a la fecha aproximadamente, incluso si consideramos optimistamente que puede haber 1000 personas en el mundo exactamente iguales a vos, quedarían aún unos 6 millones de clases para hacer dulce.
Lo que si está claro es que buena parte de la población mundial, esté donde esté ubicada en esta larguísima escalera desea subir uno o mas peldaños en cuanto sea posible. Así tenés cualquier día un joven o no tanto, morocho o no tanto, con poco para perder y mucho que ganar apuntándote a la cabeza con un 22 herrumbrado para pedirte compulsivamente prestada la billetera
Algunos dirán "pobre" (si, probablemente es más pobre que el apuntado, caso contrario la escena tendría poco sentido) otros dirán "maldito" (si, nació maldecido por un destino nada fácil de superar en una realidad que todos los días le muestra inalcanzables castillos en el aire por la TV)
Lo difícil en todo caso es verlo, ver a todos los demás (y verte) como parte del Alma del Mundo.
Si eres el apuntado no dudes en defenderte, la duda mata. Haz lo que sea necesario para sobrevivir, lo que sea menos odiarlo, el odio es incluso contraproducente en la batalla, te quita objetividad en la acción.
Todos incluso el que te está apuntando somos parte del Mundo y merecemos un lugar en él, el lugar que nos toco en suerte, el lugar que nos ganamos, el lugar que pudimos conseguir o juremos con gloria morir... Un lugar, tu lugar, el lugar del que te limpia el vidrio en un semáforo, el que te cuida el auto en la esquina, el que inventó la vacuna contra el salpullido del aburrimiento, el lugar del payaso del circo Sarrasani, el CEO que acumula millas en su tarjeta Visa, el jugador empedernido, el poeta de café, el dictador de turno, la enfermera que te da los turnos, el que diseñó los rascacielos, el que se come un sandwich en la parecita de la Cañada, los manifestantes que hoy te cortaron la calle, colchoneros, reyes de bastos, caraduras, polizones, los que se mueren de golpe, los que dieron el golpe...
Cómo se sentiría tan bueno el bueno si no fuera por los malos? Como se sentiría tan derecho el derecho si no fuera por los torcidos? Todos somos lo que somos referenciados en el Alma del Mundo y por contraste con los demás, con los "otros". Bienvenidos sean los diferentes porque nos ayudan a existir.
La vida en todo caso se encarga de igualarnos al principio y al final: Todos nacemos pequeños desnudos e indefensos y todos morimos (con suerte) viejos vestidos e indefensos. Solamente al medio nos diferenciamos más (a veces menos de lo que parece)
Como sugiero mirar esta selva? Con armonía conflictiva o bien con conflicto armonioso, Usted elige :-)
Las diferencias que producen los conflictos son el motor del mundo, mal que nos pese si Marx algún día tuviera finalmente su utopía y fuéramos todos iguales el Mundo aparte de tornarse un lugar muy seguro y aburrido se terminaría deteniendo por completo hasta finalmente dejar de girar sobre su órbita y caer al Sol.
Desde un punto de vista "macro" los conflictos son imprescindibles para que exista el movimiento que tarde o temprano produce el avance (que el mundo avanza es una discusión aparte motivo seguramente de otro post). Por lo tanto deberíamos poder ver una cierta armonía detrás de todos los conflictos y más allá de las implicancias personales que puedan tener para cada uno de nosotros. Deberíamos poder eventualmente incluso poder ver al enemigo como parte del Alma del Mundo, igual y no tan diferente en el fondo que cada uno de nosotros, aún cuando circunstancialmente sea tu enemigo.
Obviamente dirá alguno con vehemencia es muy fácil divagar sobre estos temas tan "macro" desde la comodidad que da el teclado de una computadora, y tiene razón...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que no quita veracidad (a mi entender) a lo que estabas comentando.

Es cierto, son las diferencias el motor del mundo, es la repulsión (y conceptos magnéticos que no domino/intereso bien) los que hacen que los planetas mantengan sus órbitas. El comercio existe porque tenemos diferentes cosas para ofrecer, el precio se obtiene de las diferencias entre el oferente y el demandante (nada legal).

Pensarán seguramente que estas son meramente diferencias, pero cuando puedo agregar que cuando el abismo que separa una posición de otra (aunque no sea tan abismalmente grande, solo lo parezca) se vuelve manifiesto, nosotros las personas tenemos tendencias a generar conflictos, me incluyo.

Y es eso justamente (y estoy redundando en tu post en realidad) lo que mueve.

Antonio the Outlander dijo...

Asi es Limpia, solo la "diferencia de potencial" (término de la electrónica) genera la "corriente" del movimiento.
PD: Puse un post en tu blog de "Historias de Colegio" que quedo horriblemente formateado por un problema de mi browser, te agradeciría si lo corregís ok :-)